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Ninfas en el rellano
Ninfas en el rellano
Pedro es un cuarentón solitario, casi calvo, poco atractivo, con un poco de sobrepeso, peludo y algo tímido.
Pedro sube por las escaleras hacia su casa, en uno de los rellanos encuentra a dos chicas, las reconoce, son dos amigas de una vecina, están fumando un cigarro que se pasan una a otra. Son dos chicas de 20 años, las dos delgadas con el pelo corto, una rubia y otra morena, las dos van vestidas con faldas a cuadros verdes, medias de punto blanco que se pierden por debajo de sus faldas cubriendo sus muslos, camisas blancas que marcan los pequeños pechos de la rubia y las más voluptuosas tetas de la morena, unos zapatos de deporte blanco acentúan su estética juvenil……
Pedro vuelve de pasear un poco por el parque, al ver a las dos jóvenes se queda parado un segundo, no puede evitar abrir sus labios y quedarse fascinado, de repente vuelve en sí, agacha la cabeza mientras sigue andando, va en pantalones cortos y se siente un poco ridículo ante ellas.
Las dos chicas le miran, ríen, al pasar junto a ellas la chica morena estira su pierna y le corta el paso, una larga y perfecta pierna cubierta por una media de punto blanco hasta el muslo se muestra ante Pedro.
-¿dónde vas?-le dice mientras le pasa el cigarro a su amiga
Pedro no dice nada, levanta la mirada y mira hacia arriba por el hueco de las escaleras, no se escucha a nadie, es hora de la siesta.
Pedro mira la pierna de la joven delante de él, larga y perfecta, su media de punto blanco le fascina. La chica rubia también se acerca a él, da una calada al cigarrillo, Pedro retrocede tímido hacia la pared del rellano de la escalera, no dice nada, mira al suelo
-¿que qué tal?-ríe la chica rubia
Pedro aparta la cabeza hacia un lado, no dice nada. La joven morena baja su pierna y se acerca a él, Pedro retrocede más y aplasta su espalda contra la pared del rellano, se agarra hacia atrás en el pasamanos de madera de la escalera que también continua por el rellano entre plantas.
La joven morena de pelo corto le mira de arriba abajo, coloca una mano en la pared junto a la cara de Pedro, el nota su perfume con olor a fresa. La chica rubia también se acerca, agarra a su amiga por un hombro, le echa el humo a la cara a Pedro, el tose, la rubia sonríe por primera vez, guiña un ojo a su amiga morena.
La joven morena se acerca a la mejilla del hombre, Pedro con la cara girada cierra los ojos, nota como la joven lanza un pequeño soplido a su mejilla, el olor a fresa le encanta a Pedro, lanza un suspiro, la morena sonríe por primera vez, guiña un ojo a su amiga rubia.
-¡que mono con esos pantalones cortos!-susurra la rubia
-¡mmm y como se le marca el pecho en la camiseta al calvito!-susurra la morena
Pedro, con los ojos cerrados y la cabeza girada a un lado se siente intimidado por las dos jóvenes, él se siente tan viejo y poco atractivo que aunque las chicas se estén riendo de él es lo más excitante que le ha pasado en mucho tiempo.
De repente la chica rubia se abalanza sobre Pedro, le agarra por sus pantalones cortos de deporte e intenta bajárselos
-¡ja, ja, anda a ver que tienes ahí, gordooo!-ríe la rubia
Pedro abre los ojos y en estado de pánico consigue sujetarse los pantalones
-¡queee, no, no, noo!-se queja Pedro que cruza las piernas para evitar que la rubia le quite los pantalones
De repente la morena también se abalanza sobre él y comienza manosearle la camisa
-¡ja, ja, ja, calvito venga, anímate!-ríe la morena
Pedro nota como las manos de la morena recorren su pecho, arrugando su camisa, nota como una de sus manos se mete bajo la tela, nota la mano de la mujer acariciando su vientre
-¡vamos gordito!-ríe la morena
Pedro agarra la mano de la joven morena con fuerza, intenta sacársela de debajo de su camiseta mientras con la otra mano sigue agarrándose los pantalones que la rubia sigue intentando quitárselos a la fuerza.
.¡vamos cabroncete, juega con nosotras!-ríe la rubia
De repente Pedro nota una mano de la rubia que le acaricia una pierna bajo los pantalones, Pedro lanza un gemido, la rubia ríe más mientras sigue intentando bajarle los pantalones
Pedro retuerce su cuerpo aplastado contra la pared del rellano, se queja mientras las dos jóvenes siguen manoseándole, nota como la mano de la rubia que le acariciaba una pierna ahora sube y le manosea el culo, Pedro lanza otro gemido, la rubia ríe.
Durante un segundo mira a la preciosa rubia, de ojos verdes, precioso pelo corto, sus pequeños pechos se marcan en camisa blanca, su agresividad hace acelerar el corazón de Pedro.
Pedro nota como la morena intenta levantarle la camiseta, él se resiste, la respiración de Pedro se acelera, la chica morena insiste en subirle la camiseta para quitársela, él se resiste
-¡vamos nene a ver que tienes para nosotros!-ríe la rubia
-¡vamos puto gordo enseña ese cuerpo!-ríe la morena
De repente Pedro nota como la rubia le agarra un segundo su entrepierna.
-¡uy, todavía la tiene encogida!-ríe la rubia
Las dos jóvenes siguen humillando a Pedro, él se resiste, se agarra desesperadamente la ropa.
De repente la joven chica morena de grandes pechos le lanza una bofetada a la mejilla de Pedro
-¡ya, vale, ya!-grita autoritaria la chica morena a la cara de Pedro mientras le señala con un dedo amenazante
Pedro la mira a sus preciosos ojos negros, no dice nada, no se mueve, deja de oponer resistencia, solo nota como la rubia le baja los pantalones, sus pequeña polla flácida se deja ver un segundo mientras Pedro se la tapa de forma intuitiva mientras sigue mirando cara a cara a la joven morena
-¡eso es buen chico, ahora nos entendemos!-susurra la joven morena que le da otra bofetada a la mejilla de Pedro, el no reacciona.
La morena retrocede, se desabrocha su camisa blanca, la rubia la imita, ante Pedro las dos jóvenes le enseñan sus preciosas tetas, las pequeñas tetitas de la rubia, las voluptuosas de la morena, sus camisas blancas desabrochadas caen a los lados de sus pechos.
-¡anda a ver que tienes para nosotras tonto!-susurra la morena
Pedro aparta la mano de su polla, las dos jóvenes miran serias su polla todavía pequeña y encogida
Las dos chicas le miran serias, no se ríen de Pedro
-¡quítate todo!-dice seria la rubia mientras sujeta a su amiga y con la otra mano da una calada al cigarrillo
Pedro mira a la rubia, ve como sujeta a su amiga morena, mira sus bonitas y pequeñas tetitas, el mira también su faldita a cuadros verde y sus medias de punto blancas a juego con su amiga, mira la generosas tetas de su amiga que también se ofrecen ante él.
Pedro obedece, aparta sus manos, su pequeña polla sin circundar se deja ver
-¡mmm que mono!-dice la rubia riendo
-¡sigue ostias!-ordena la morena
Pedro agacha la cabeza, comienza a quitarse su camiseta, el torso desnudo del cuarentón aparece ante las chicas
-¡su puta madre, que pecho!-dice la rubia que da otra calada al cigarrillo
Pedro se da la vuelta, se sujeta al pasamanos para quitarse las zapatillas de deporte, gira la cabeza para seguir viendo a las dos ninfas que le miran en silencio, las dos jóvenes miran su culo, Pedro sonríe por primera vez
Pedro se inclina un poco para desabrocharse los cordones de los zapatos, sus huevos cuelgan por detrás
-¡qué cabrón!-grita la rubia que tira su cigarrillo, aparta a su amiga y se lanza hacia Pedro, le agarra el culo y le aplasta contra la pared, su amiga morena ríe y también se abalanza sobre Pedro. Las dos comienza a manosearle, la polla de Pedro comienza a crecer
-¡que cabrón, que cabrón, como me pone!-gime la rubia que de golpe agarra los huevos a Pedro
Pedro gime al notar como la rubia le coge por detrás sus huevos
-¡mírale, que gordito, que peludito, que macho, como nos ha puesto!-ríe la morena que también manosea a Pedro
-¡ahhh, ahhhh, siii, por favor, siii!-gime Pedro que se deja manosear
La chica morena se agacha, le quita sus zapatos a Pedro, luego le acaricia sus piernas de abajo a arriba, mientras la rubia sigue agarrando los huevos de Pedro
-¡qué bien le cuelgan!-gime la rubia
Desnudo en el rellano Pedro comienza a gemir en voz alta, se sujeta al pasamanos de madera, nota como la chica morena aparta a su amiga, la rubia suelta enfadada los huevos de Pedro, su amiga morena agarra a Pedro por la cintura y le echa un poco hacia atrás, Pedro se inclina sujetándose con más fuerza al pasamanos, mira hacia atrás, mira como la joven se levanta la falda a cuadros, no lleva bragas, muestra su coñito depilado, se lo abre, acerca su coñito depilado, lo posa en la nalga izquierda de Pedro, comienza afrontarse contra el
-¡ahh Diosss!-grita Pedro al notar el coño de la joven ya húmedo
-¡así, así!, ¿te gusta así?-gime la morena que hace que le folla
-¿has visto, has visto? ¡ya lo tengo mojado por ti!-gime la morena
Pedro gira la cabeza y mira a la amiga rubia que saca su lengua y la mueve viciosa
Pedro gira su cabeza y mira hacia a la pared mientras se sujeta con fuerza al pasamanos, mientras nota como la chica morena se agita contra su culo
La rubia se acerca por un lado, se quita del todo su preciosa camisa blanca, se coge un tetita y se la acerca a la cara a Pedro, él se gira, mira los preciosos ojos verdes de la chica rubia, mira su preciosa tetita. Comienza a mamar la preciosa tetita
-¡ay siii, mámamela!-gime la preciosa rubia mientras con una mano se sujeta la teta para dársela a mamar y con la otra le agarra la cabeza a Pedro
Pedro gime ahogado por la pequeña teta, gime notando su culo húmedo frotado por el coño de la morena
-¡si, si, si, toma, toma!-gime la morena mientras le agarrara con fuerza la cintura y hace que le folla, masturba su depilado coño contra el culo de Pedro
Pedro nota su cuerpo golpeado por la morena, su cintura agarrada por las manos de la joven ninfa, nota su boca llena por la teta que la rubia le da a mamar
-¡así, buen chico!-murmura la rubia mientras le da de mamar, mientras comienza a acariciar la calva de Pedro.
Pedro aparta su boca del precioso pecho de la rubia, mira hacia atrás, hacia la morena y gime con fuerza, asiente con la cabeza a la morena
La morena se muerde su labio inferior
-¡mmm gordito como me pones, estás de buen año!-gime la morena que da un azote al culo de Pedro, que se inclina sobre la espalda de Pedro y le muerde el cuello
-¡aghhh, siiii, muerde, muerdeee!-grita Pedro
Pedro gime en voz alta mientras se deja someter, mientras la rubia comienza a magrearle el pecho
-¡su puta madre, está en forma el gordito, que cuerpo más bonito!-ríe la rubia
La polla de Pedro ya dura se agita sola y dura mientras nota las embestidas de la morena, mientras nota las preciosas manos de la rubia acariciarle
De repente Pedro se revuelve, aparta a la morena de su culo, aparta las manos de la rubia. Retrocede, se sujeta al pasamanos, mira a las dos hembras, ellas le miran, miran su polla dura, no la tiene grande pero ellas la miran con deseo.
-¡nos vale esa polla cielo!-gime excitada la morena que se relame con la lengua, se termina de quitar su camisa blanca. Su amiga rubia se acerca a ella y pasa su brazo por el hombro de la morena.
-¡escoge!-grita la rubia enseñando los dientes
Pedro mira a las dos ninfas, con los pechos al aire, sus sensuales faldas a cuadros, sus imponentes medias de punto blanco
Pedro hace un gesto de negación, no puede escoger.
De repente la morena comienza a denudarse más, poco a poco se quita sus zapatos de deporte blancos, luego comienza a agitar su cuerpo para quitarse la falda de cuadros. Su amiga rubia mira a Pedro y ríe, mira como su polla se agita sola excitada, mira cómo se marcan más y más las venas en su polla.
La morena comienza a quitarse las preciosas medias de punto blanco, Pedro hace un gesto de negación con la mano, ella comprende y se las deja puestas, sonríe, se sube todavía más las medias hasta casi el coño.
-¡Diooos!-gime Pedro
De golpe Pedro se agarra la polla y comienza a masturbarse
-¡siiiii, eso es!-grita la rubia que también se comienza a desnudar, también se deja puestas solo las medias blancas
-¡por Dioooos que buenas estáis!-grita Pedro con rabia mientras se masturba con violencia, la joven rubia pasa su lengua por la mejilla de su amiga morena.
Pedro no puede más, se lanza hacia las dos preciosas mujeres, ellas le reciben rodeándole con sus manos, se manosean los tres, golpeándose contra la pared del rellano, besándose, agarrándose los culos
Pedro nota su polla rozar contra las medias de punto blanco hasta los muslos de ellas, mientras las besa a turnos, mientras las agarra sus culos, mientras le agarran su culo, su pecho, su cuello
La rubia le agarra mi polla
-¡mmm cariño si, que bonita pollita!-le susurra al oído mientras le masturba
-¡mmm que cuerpo más bonito tienes!-le susurra al oído la morena mientras magrea su pecho
Pedro besa a la morena mientras agarra una de las grandes tetas de la morena con una mano, con la otra agarra una de las pequeñas tetitas de la rubia, las dos le abrazan, se turnan para besarle, nota sus lenguas entrar y salir de su boca
-¡que pollita más dura cariño!-gime la rubia mientras sigue masturbando a Pedro
Pedro acaricia la espalda de la rubia mientras la besa, acaricia su pelo
-¡claro que sí, tu nos entiendes!-murmura la rubia mientras Pedro le besa
La joven morena agarra la mandíbula de Pedro, la aparta de la boca de su amiga y besa a Pedro, de repente se aparta y vuelve a darle otra bofetada, él sonríe.
De repente Pedro se revuelve otra vez, retrocede, la rubia le suelta la polla, Pedro mira a la morena y se abalanza sobre ella, la empuja hacia la pared, ella se sube al pasamano del rellano, abre sus piernas, Pedro acaricia sus medias de punto blanco, agarra sus piernas y las levanta. La rubia se ríe, se acerca mientras Pedro sujeta a la morena, la rubia le agarra la polla y la acerca al coñito depilado de su amiga. Con la otra mano le agarra la mandíbula, la gira hacia su cara, le mira frente a frente seria, le da un beso
-ya has escogido …. ¡fóllatela!-grita la rubia
Pedro sonríe, gira la cabeza, la morena agita su respiración, no dice nada, solo asiente ansiosa
De golpe Pedro comienza a meter su polla, se la folla….
-¡ahhhhh!¡si, si, siii!-gime la morena que cierra los ojos y extiende sus brazos para agarrar los hombros de Pedro
Poco a poco Pedro se folla a la joven morena con más ritmo, más violento, nota su polla entrar y salir en el coño depilado de la joven tetona, él con su cuerpo un poco gordo, peludo, grande se abalanza sobre el pequeño y delgado cuerpo de la joven, sus grandes pechos se agitan.
Pedro nota como la rubia se coloca detrás de él, nota una mano meterse entre sus piernas y cogerle con suavidad sus huevos que se agitan con las embestidas a la morena
-¡que macho!-gime la rubia detrás de Pedro mientras sujeta al peso los huevos del cuarentón, nota como los huevos se mueven en sus manos
La rubia le suelta los huevos a Pedro, se levanta, abraza a Pedro por detrás
-¡fóllatela, fóllatela!-gime detrás la rubia mientras le acaricia los hombros.
La rubia baja una mano y le magrea el torso peludo a Pedro, baja su otra mano y comienza a masturbarse ella
-¡fóllatela, fóllatela!-gime en la espalda de Pedro, mientras se masturba, mientras le agarra el pecho, mientras le empuja con su cuerpo hacia su amiga
Pedro ve como la morena que folla gime medio ida, ve caer saliva de la boca abierta de la joven morena, nota el cuerpo de la rubia empujándole desde atrás
-¡tú puta madre como follas!-gime la morena babeando con los ojos cerrados
Pedro sigue acariciando sus piernas, sus medias de punto blanco, se inclina hacia delante, la rubia se echa sobre su espalda sin dejar de masturbarse ella, Pedro comienza a mamar una de las enormes tetas de la joven morena, ella suelta la barandilla y rodea la cabeza de Pedro
-¡ay siii, mama teta!-gime la morena que deja caer más saliva de su boca
Pedro sigue follándola, sigue mamando teta, de repente la rubia se deja de masturbar y de un salto se sube a la espalda de Pedro, el nota su pequeño cuerpo, saca de su boca la teta de la morena, un hilillo de saliva queda entre la teta y su boca, Pedro comienza a reír al notar como la rubia cabalga sobre su espalda, Pedro agita su cuerpo mientras la rubia le abraza desde atrás
La morena despierta de su trance, abre los ojos y ve que su amiga se ha subido a la espada de Pedro
-¡eh oye, no pares!-se queja la morena que le vuelve a abrazar y le obliga a que siga mamándola la misma teta, el obedece sumiso
-¡así, así, lo ves, come, come!-gime la morena que mira a su amiga y la guiña un ojo
De repente Pedro nota como la morena comienza a convulsionarse
-¡espera, espera, ya, ya, ya viene!-gime la morena que comienza a retorcerse
Pedro vuelve a separar su boca de la teta de la ninfa morena, ve como la morena comienza a convulsionarse, se le van los ojos, se corre mientras de su boca cae más saliva
-¡Si coño, cabrón, cabrón, hijo de puta, hijo de puta!-grita mientras su cuerpo excitado, su coño húmedo, se mueven con violencia
A Pedro le cuesta controlar a la joven morena que se agita entre sus piernas mientras se corre
-¡ja ja, ya la tienes campeón!-ríe la rubia subida a la espalda de Pedro
Poco a poco la joven morena se va calmando, Pedro la saca su polla, ella le mira a los ojos, coge un poco de su saliva de sus labios y se lo entrega a Pedro, el chupa los dedos de la joven, saborea la saliva de la morena mientras ella se deja caer al suelo, su amiga rubia se descuelga de la espalda de Pedro.
La joven morena mira desde el suelo del rellano el cuerpo grande y peludo de Pedro
-¡cabrón!-dice seria la morena
La amiga rubia se mueve y agarra el pasamanos de madera, echa hacia atrás su culo, abre sus piernas cubiertas por las medias de punto blanco
-¡ahora yo, ahora yo!-suplica la agresiva rubia
Pedro mira a la morena tirada en el suelo, sonríe viendo a la joven medio ida que le mira sumisa, Pedro se agarra la polla con una mano mientras se dirige hacia el culo de la rubia que le espera, Pedro guiña un ojo a la morena, ella baja la mirada
Pedro se centra en la preciosa rubia, la agarra por la cintura, acaricia el borde de sus medias de punto blanco que rodean sus muslos, acaricia su espalda, acaricia su pelo
-¡bonita diosa nórdica!-susurra Pedro que comienza a follar el culo de la joven
-¡ahhh, si, joder!-gime la rubia
Pedro folla a la rubia, la agarra por la cintura mientras la embiste, su cuerpo se agita sobre el pequeño cuerpo de la joven mientras en el suelo la amiga morena le mira, ve su polla meterse dentro de su amiga
De repente Pedro nota como la joven morena que l mira desde el suelo desvía la mirada, mira hacia las escalera, Pedro gira su cabeza, ve a otra vecina que les está mirando desde las escalera del piso de arriba, es una mujer cuarentona, enfundada en una bata les mira con la boca abierta
-¡señora, métase en su casa!-grita la joven morena
-¿queee?-gime la rubia sobresaltada
La rubia ve también a la vecina que les mira, ella no dice nada y vuelve a girar la cabeza hacia la pared mientras nota el cuerpo de Pedro que sigue embistiéndola
Pedro mira a la vecina cuarentona, ve como ella se mete una mano debajo de la bata y se masturba viéndoles, Pedro sonríe, saca su polla del culo de la ninfa rubia
La joven rubia se queja, mira hacia atrás, ve como Pedro enseña su polla a la cuarentona, ve como con una mano se la agarra y se la golpea contra la palma de la otra mano para luego volver a montarla
-¡si joder, como controlas, enseña a la vieja como follas!-ríe la rubia que posa su mejilla en la pared, mientras sigue sujetándose con una mano en la barandilla con la otra comienza a masturbarse, agita su vientre.
-¡así guapo, así guapo, tu sí que sabes!-gime la rubia mientras se mete dos dedos en su coño
Pedro mueve su cintura mientras se folla a la rubia, mientras mira a turnos a la cuarentona y a la joven morena
Poco a poco la joven rubia comienza a correrse
-¡ya estoy ya estoy!-gime la joven
Pedro saca su polla del su culo y comienza a correrse en el culo de la joven
La joven rubia se corre mientras nota el semen de Pedro caer sobre su culo
-¡eso es, eso es, dame tu leche, dame tu leche!-gime la joven rubia con su boca babeando pegada a la pared
Pedro ve caer su leche en el culo de la joven, esa preciosidad inalcanzable para él, ahora a sumisa para él, ve como su amiga morena se acerca y comienza a lamer el semen en el culo de su amiga, ve como la vecina cuarentona baja las escaleras, se agacha y comienza a lamer la otra nalga de la rubia lamiendo también su semen
-¡oiga señoraa!-ríe la joven rubia que mira hacia atrás a la cuarentona lamerla su nalga
Pedro se aparta exhausto mira a las tres hembras delante de él, las tres se giran hacia el
La joven morena se levanta, abraza a Pedro
-¡estás bien cielo!-susurra ella mientras le besa en la mejilla, Pedro asiente……